Sello Enoquiano «Yo Soy, El Que Soy»
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Sello Enoquiano «Yo Soy, El Que Soy»

Sello Enoquiano «Yo Soy ,El Que Soy»

Símbolo de poder, utilizado por los ancestros.

Hace referencia a los tiempos de Enoc, en el idioma que tanto los ángeles como los humanos se comunicaban antes de la torre de Babel (esa historia, la dejaremos para después).
Los hombres y dioses, y los ángeles todos, hablaban el mismo idioma. Eran tiempos donde la longevidad se media por siglos, y la riqueza era muy equitativa entre los seres.
Cada hombre tenía una función productiva y no eran ni más ni menos que otras.

Contiene en el centro el Tetragramaton y al rededor la inscripción «Yo Soy El Que Soy, El Alfa y El Omega»

Tetragramaton:
Éste es uno de los amuletos de protección más utilizados en nuestros días por el poder que contienen, pero también, es el símbolo más incomprendido de los sigilios y sellos de poder.
Fué utilizado por celtas, asirios, fenicios, griegos, romanos… hasta la era del oscurantismo, cuando la iglesia se entera que sus Caballeros Templarios protegían sus rituales y a ellos mismos con éste sello. Cabe mencionar: la Orden Templaria fué producto de la Iglesia para invasión y hurto de las riquezas de muchos pueblos; sin embargo, durante sus combates, descubrían poco a poco el poder de innumerables rituales, objetos y sellos, como éste.

Otra de sus cualidades es mostrar a quien lo lleva, el camino hacia la luz y sabiduría interior.

La estrella con punta arriba, representa el dominio del hombre sobre los cuatro elementos. Los Gaianos consideraban incluso la unión del hombre con el cosmos; mientras que del revés, con las dos puntas hacia arriba representa la dualidad que reina el el universo: las dos puntas representan lo masculino y lo femenino, la luz y la sombra, como es arriba es abajo… todo uniéndose, fusionándose poco a poco, hacia la punta de abajo que representa el origen de todo, el punto de nacimiento (útero) de la vida, y por ende la dualidad. Existe uno porque existe el otro, si alguno no existe, el otro tampoco. También se lee: el origen (punta inferior) creadora de todo lo existente.

Siglos posteriores, le atribuían otro aspecto correspondiente del dios pan…

El mito de la representación del mal, se viene abajo cuando entendemos el pentalfa como parte de un todo.

Este sello muestra poder, protección, pero también respeto y empoderamiento.