Pensamientos del corazón
PENSAMIENTOS DEL CORAZÓN
Louise Hay.
ACEPTACIÓN
Mírate en el espejo y di: “Me amo y me acepto exactamente tal como soy”
¿Qué es lo que te viene a la mente? Observa cómo te sientes. Quizá sea esto el centro de tu problema.
Acepto todas las partes de mí mism@
Lo más importante del proceso de sanarnos o de integrarnos en un todo es aceptarnos totalmente a nosotros mismos, con todas nuestras múltiples partes.
Aceptémonos cuando actuamos bien y cuando no lo hacemos tan bien, cuando nos asustamos y cuando demostramos nuestro amor, cuando nos comportamos tontamente y cuando nos mostramos brillantes e ingeniosos, cuando fracasamos y cuando ganamos.
Todo esto son distintas facetas de nosotros mismos.
La mayoría de nuestros problemas provienen de que rechazamos partes de nosotros mismos: no nos amamos total e incondicionalmente.
Que la mirada que echamos sobre nuestro pasado no sea de vergüenza.
Miremos al pasado viendo en él la riqueza y la plenitud de la Vida. Sin esta riqueza y esta plenitud no estaríamos hoy aquí. Cuando nos aceptamos totalmente nos
convertimos en seres íntegros y sanos.
Si no te amas total, entera y plenamente, es porque en algún momento aprendiste a no amarte pero puedes desaprenderlo.
Empieza a ser amable contigo ahora mismo.
Acepto todo lo que he creado para mí mism@.
Me amo y me acepto exactamente tal como soy.
Me apoyo, confío en mí y me acepto allí donde esté.
Puedo existir dentro del amor de mi propio corazón.
Me pongo la mano sobre el corazón y siento el amor que hay en él.
Sé que en él hay mucho lugar para aceptarme tal como soy aquí y ahora.
Acepto mi cuerpo, mi peso, mi altura, mi aspecto, mi sexualidad y mis experiencias.
Acepto todo lo que he creado para mí mism@.
Mi pasado y mi presente.
Estoy dispuesta a dejar que mi futuro suceda.
Soy una Expresión Divina y Magnífica de la Vida, y me merezco lo mejor de lo mejor.
Y lo acepto para mí, ahora.
Acepto los milagros.
Acepto sanar.
Acepto que estoy a salvo.
Y sobretodo, me acepto a mí mism@.
Soy un ser único y valioso,y me aprecio como tal.
Y así es.
Si esperamos a ser perfectos para amarnos a nosotros mismos,
perderemos la vida entera.
Ya somos perfectos, aquí y ahora.
Soy perfecta tal como soy.
No soy demasiado ni demasiado poco.
No tengo que demostrar quién soy a nadie ni a nada.
He llegado a saber que soy la perfecta expresión de la Unidad de la Vida.
En la Infinitud de la Vida he tenido muchas identidades, cada una de ellas una expresión perfecta para aquella vida en particular.
Estoy content@ de ser quien soy y lo que soy esta vez.
No deseo ser como nadie más, porque no es esa la expresión que he elegido
para esta vida.
La próxima vez seré diferente.
Soy perfect@ tal como soy aquí y ahora. Soy suficiente.
Soy una con la totalidad
de la Vida.
No tengo que luchar para ser mejor. Todo lo que necesito es amarme hoy más que ayer y tratarme a mí misma como a un ser profundamente amado.
Al ser querid@ por mí mism@, floreceré con un júbilo y una belleza que apenas si puedo empezar a vislumbrar.
El amor es el alimento que
necesitamos los seres humanos para realizar nuestra grandeza.
Al aprender a amarme más a mí mism@, aprendo a amar más a todo el mundo.
Juntos alimentamos amorosamente un mundo cada vez más hermoso.
Todos sanamos, y el planeta sana también. Con júbilo reconozco mi perfección y la perfección de la Vida. Y así es.
AFIRMACIONES
Cuando haces afirmaciones abandonas el papel de víctima. Ya
no te sientes impotente, y reconoces tu propio poder.
Doy el paso que me llevará a sanar.
Una afirmación es un punto inicial, algo que abre el camino. Por medio de ella dices a tu subconsciente: Asumo la
responsabilidad “Me doy cuenta de que puedo hacer algo para
cambiar”. Si repites a menudo la afirmación, o bien estarás list@
para dejar que lo que sea suceda, y la afirmación se volverá verdad, o se abrirá ante ti un camino nuevo.
Quizá tengas una idea brillante o un amigo te llame para decirte: “¿No has intentado nunca hacer esto?”, y te verás guiado a dar el paso que te llevará a sanar.
Las afirmaciones proporcionan a tu subconsciente algo sobre lo cual trabajar en el momento Estoy abierta y receptiv@.
Cuando hacemos afirmaciones creamos lo bueno en nuestra vida, pero si alguna parte de nosotros mismos no cree que seamos dignos de ello, nuestras afirmaciones no se harán realidad Entonces seguramente diremos: «Las afirmaciones no funcionan», pero eso no es cierto. Si no conseguimos lo que queremos es porque no creemos que nos lo merecemos.
Debemos tomar conciencia de qué es lo que creemos.
Las respuestas que hay dentro de mí me llegan fácilmente a la conciencia.
Si haces tus afirmaciones delante de un espejo, ten siempre a mano papel y lápiz, de modo que puedas tomar nota de los mensajes negativos que te vengan a la mente mientras las dices. No es que tengas que trabajar en ese mismo momento con ello. Puedes sentarte más tarde a revisar tu lista de respuestas negativas, si las tienes, y empezar a entender por qué no consigue o que dices querer. Si no tomas conciencia de tus mensajes negativos, es muy difícil que los modifiques.
AMOR
Uno de los beneficios que obtienes cuando te amas es que te sientes bien.
Mi amor no conoce límites Tenemos tanto amor en este mundo, y tenemos tanto amor en nuestro corazón y a veces lo olvidamos, pensamos que no hay bastante, o apenas un poquito. Entonces, atesoramos lo que tenemos y nos da miedo dilapidarlo. Nos da miedo dejarlo salir.
Pero aquellos de nosotros que estamos dispuestos aprender, nos damos cuenta de que cuanto más amor dejamos salir de nuestro interior, más amor tenemos y más amor recibimos. El amor es interminable e intemporal, es realmente la fuerza curativa más poderosa que hay. Sin amor no podríamos sobrevivir, simplemente. Si a los bebés no se les da amor y afecto, se apagan y mueren. La mayoría de nosotros pensamos que podemos sobrevivir sin amor, pero eso no es cierto. El amor por nosotros mismos es el poder que nos sana. Ámate tanto como puedas.
Por lo menos tres veces al día, abre de par en par los brazos y di: “Estoy dispuest@ a dejar que penetre en mí el amor. Estoy a
salvo si dejo que el amor entre en mi interior”
Merezco amor.
No tienes que ganarte el amor, como no tienes que ganarte el derecho a respirar porque existes.
Tienes derecho al amor
porque existes. Eso es todo lo que necesitas saber. Mereces tu propio amor. No permitas que tus padres, las opiniones negativas de la sociedad o los prejuicios de la gente te hagan pensar que no te lo mereces. La realidad de tu ser es que mereces amor.
Acéptalo y sábelo. Cuando realmente lo hayas logrado, encontrarás que la gente te trata como a una persona que merece amor.
Te encuentras en el proceso de convertirte en tu mejor amigo, en la persona con quien más te alegra estar.
En este mismo momento me amo y me acepto.