El tiempo

A medida que los años pasan la ilusión de un día como hoy se va perdiendo, ya nuestra mirada no se detiene en el cielo, mucho menos busca esas tres estrellas reluciente en el firmamento.

Nos vamos perdiendo entre responsabilidades y obligaciones que hacen pasar el tiempo más rápido, ya no creemos en los super héroes ni superman , ni batman nos quitan el sueño.

Los cuentos son cosas del pasado estamos tan obstinados corriendo para un lado para el otro que nos olvidamos de contemplar una flor, no se diga olerla.

Hace mucho aprendimos qué no existe el príncipe azul, solo brujas en un cuento tan real que nos hace humanos e insensibles ante el dolor ajeno, ya no nos conmueve ni el drama en una película, ni el dolor de Dumbo buscando a su madre.

La edad nos echa en la espalda la incredulidad entre el bien y mal, ahí donde las princesas no son tan buenas, ni los lobos tan malos, la realidad nos absorve de un modo que nos cierra los brazos.

Pero hay algo en lo debemos seguir creyendo y esos son los Reyes Magos que cada año se esforzaron por dejar los regalos más bellos de nuestra niñez, hoy convertidos en lindos recuerdos, su magia nos ponía contentos cada 6 de enero, en ese regalo dejaban su amor, su esfuerzo justo donde lo imposible se hacía posible.

Acarició hoy a la niña de hace años que aunque he crecido sigo mirando al cielo en esa dulce espera de los Reyes Magos.

~Mariana Vargas O. ©®✨