DOMINGO DE RESURRECCIÓN
DOMINGO DE RESURRECCIÓN
No te equivoques amado hermano.
No fue muerte sino Vida lo que vine a enseñar.
¿Cómo iba a querer mostrarte muerte y al mismo tiempo decirte que yo soy el camino, la verdad y la Vida?
No es sufrimiento sino Amor lo que vine a entregarte.
¿Cómo iba yo a ser el símbolo del sufrimiento cuando me gozo en el feliz Amor de nuestro Padre?
No es culpa sino inocencia lo que vine a reforzar.
¿Cómo iba yo a apoyar el pecado cuando te he enseñado que no es real?
No deseo te quedes con la imagen de una cruz, más bien te invito a que te unas a Mi en la Resurrección.
Mi Resurrección es tu resurrección, porque yo no pude haber hecho algo por mí, sin ser también para ti.
JESÚS.
Crédito Marilupe Fernández