CÓMO PERDONAR O ACEPTAR EL PERDÓN DE OTROS.
DI PARA TUS ADENTROS
TE ENVUELVO EN MI CÍRCULO DE AMOR

Cuando una Ofensa se guarda en el Corazón: ésta se convierte en rencor y el rencor es el combustible para el odio.

Hay muchas personas que están enfermas física, mental, emocional y espiritualmente por la FALTA DE PERDÓN y muchas MUEREN a causa de ello, siendo el CÁNCER el mejor ejemplo, ya que el sentimiento de odio, venganza, rencor, ira termina carcomiendo y destruyendo de a poco al ser humano en su desequilibrio mental, emocional, físico y espiritual.

Aquel que le es difícil Perdonar también le es difícil aceptar el perdón.

La Culpa forma parte de la vida y eso enferma en todas las áreas de nuestra vida.

Cuando alguien nos pide perdón dudamos en perdonarlo porque las HERIDAS QUE SE ABREN en la vida son parte de las relaciones más cercanas y es por eso que duele, como así también las mayores satisfacciones son las que nos dan los más próximos.
Cuando una herida se abre tenemos que comprender que la única manera para CICATRIZARLO es la MEDICINA DEL PERDÓN (es un regalo Divino).

JESÚS nos enseñó a PERDONAR a través de su EJEMPLO, nadie sufrió más que ÉL, ni vivió la mayor de las injusticias, traiciones, humillaciones, negaciones, dolores, violencia…
PERDONAR es un ARTE y requiere de un PROCESO, no es que cuando uno perdona y te dicen “te perdono” y en ese momento se sanó la herida… hay un proceso de restauración y es la única manera de librarnos de nuestro dolor (es un asunto interno delicado).
Cuando uno deja que la herida empiece a cicatrizar colocando la medicina correcta, un día esa cicatriz ya no va a doler más, sólo nos recuerda que en un momento nos herimos. Así funciona el Perdón, nos ayuda a Restablecer nuestras relaciones primero con Dios y luego con nuestros semejantes.

Como todos nos equivocamos, tenemos que aprender a perdonar porque en algún momento nosotros también vamos a necesitar del perdón.
Lo que genera más daño a la salud es cuando masticas tu propio dolor en lugar de practicar el perdón, maltratándote con pensamientos, emociones y actos negativos/perjudiciales hacia otros, pero recuerda que de esa forma tú eres el que se inyecta su propio veneno, muriendo lentamente tú mismo.

EL PERDÓN es un REGALO que se ofrece, UNO MISMO SE LO DA, es la cura que Dios estableció para desatarte de aquel sentimiento que te une de manera negativa a otra persona y que DECIDES romper y pedirle a Dios su intervención para que te ayude a perdonar o aceptar el perdón de otro y cerrar una herida.
Cuando tú le confiesas a Dios tus pecados, tu arrepentimientos, las acciones que te duelen que haces con total sinceridad: ÉL TE PERDONA POR COMPLETO y te conviertes en su amigo, sueltas la culpa y te llenas de PAZ.

Y si alguien te ofende y no te pide perdón, por tu propia SALUD tienes que decir perdonarlo ya que si no te envenenas tu mismo. Necesita tomar esa decisión y si te es muy difícil también puedes recurrir a ayuda terapéutica para equilibrar tus emociones y auto-perdonarte, además de la ayuda espiritual.

Aprende a manejar tus Pensamientos revueltos reemplazando con la promesas de liberación y perdón que Jesús nos dejó de ejemplo.
Antes de la sanidad física, Jesús los sanaba por dentro, primero ÉL quiere cambiar tu corazón, transformar tu vida, curar tus heridas emocionales, consolarte, protegerte.

Confía en Dios, entrégate a su voluntad y pídele a partir de hoy que te restaure junto a tu compromiso de amor propio y así vas a experimentar el mayor milagro de tu vida.
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– Créditos a quien corresponda